Luego de ser la atracción familiar y la alegr
ía de mis nietos, fue también para mayores, alguno vecinos que no pudieron retener el deseo de ver la camada de bichejos, como pequeños lobos, chupando de las tetas de la perra, con sus ojos todavía cerrados, pero con un apetito voraz, fueron creciendo rápidamente, en unos doce días ya fueron abriendo los ojos y a partir de entonces, los peluches, que así son, fueron
correteando por el jardín, sin no, pocas trastadas simpaticas.
¿que has hecho con los cachorritos?. Un vídeo muy tierno, y una imagen preciosa de maternidad que los animales nos suelen dar unas buenas lecciones. un abrazo
ResponderEliminar